La alimentación es un pilar básico de nuestra salud, por ello debemos prestarle la atención que se merece y cuidarla. Los hábitos alimentarios se adquieren sobre todo en la infancia, por lo que si nuestros hijxs son educados desde pequeños a que coman de manera saludable, siendo nosotros los responsables y su ejemplo a seguir, en un futuro serán unos adultos sanos, además de conseguir en la actualidad un correcto crecimiento y desarrollo, y pudiendo mejorar su rendimiento escolar por seguir una correcta alimentación.
Los horarios de la jornada laboral, el estrés, la comodidad entre otros muchos factores, hace que prestemos menos atención a nuestra alimentación y que vayamos a lo “fácil” consumiendo cada día más alimentos ultraprocesados que nos ofrece la industria alimentaria, cómodos y rápidos de preparar, pero no siendo una opción saludable.
El futuro que les espera a nuestros hijos es muy negro, ya que en 2030, se estima que el 70% de la población tendrá sobrepeso y de éstos el 30% padecerá obesidad junto con las enfermedades que están unidas a este exceso de peso como la diabetes, colesterol alto, cáncer, entre otras muchas. Por ello, debemos y podemos evitarlo.
En una alimentación saludable existe una mayor presencia de una variedad de alimentos de origen vegetal (frutas enteras, hortalizas, frutos secos, legumbres, integrales como pan, pasta, arroz, etc.), una menor cantidad de alimentos de origen animal tales como pescado, lácteos y huevos, un consumo ocasional de carnes rojas, y excepcional de carnes procesadas, en la que se ingieren poquísimos alimentos superfluos y en la que hay un escaso o nulo consumo de bebidas alcohólicas.
Para poder conseguirla podemos seguir el “Método el plato saludable”, este debe estar dividido en 3 partes, la mitad del mismo la llenamos con verduras y hortalizas, la otra mitad del plato, la dividimos en dos partes, una de ellas debe consistir en productos proteicos (carne, pescado, huevo, legumbres…) y la otra parte, que nos queda, debe contener cereales integrales (pan, pasta, arroz…).
CONSEJOS PARA CONSEGUIR QUE COMAN SALUDABLEMENTE
• Respeta el apetito del niñx en todo momento. No lo obligues a comer nunca.
• Haga que la hora de desayunar/ comer/ cenar sea agradable.
• Mantener horarios fijos de las comidas y siempre que sea posible hacerla en familia.
• Lo único que se debe variar en relación con la comida del resto de la familia son las cantidades ya que se recomienda no hacer comidas especiales.
• Nunca chantajear con la comida. No utilizarla ni como premio ni como castigo, porque se hacen asociaciones negativas a ciertos alimentos.
• Ofrecele siempre alimentos saludables y reales, y deja que el niñx elija entre ellos, no podemos ofrecerle una manzana y un bollo; lo que hay que ofrecerle es por ejemplo, un plátano y una manzana y que elija entre estos alimentos, ambos saludables. Póngalos a su alcance, se ha demostrado que tener a la disposición y a la vista, alimentos saludables, hace que se consuman más, en cambio si no los ponemos a su disposición, no los comerá porque no tiene acceso a ellos. ¡Pon un frutero al alcance de toda la familia!
• Evita tener en casa alimentos superfluos (golosinas, galletas, refrescos, etc.). Pero sin restringirlos porque esto incrementará su preferencia hacia ellos.
• Acostúmbralos desde el principio al sabor natural de los alimentos (los yogures naturales sin azúcar, el cacao puro…), no le ofrezcan yogures azucarados porque sea a tí a quien no te están buenos, ese no es su sabor “natural”.
• Si hay algún alimento que no le gusta no hace falta que lo coma. Ningún alimento es imprescindible en su alimentación. Puedes ofrecer sin obligar tantas veces como quieras ¡Paciencia!
• El agua siempre debe ser la bebida estrella y la deben tener siempre a mano.
• El abuso de la comida rápida nunca es aconsejable, pues contribuye a la formación de malos hábitos alimentarios y a la obesidad infantil.
• Si la comida la realizan en la escuela donde los menús suelen estar elaborados por un TSD o DN, haz que el resto de sus comidas sean saludables y complementen correctamente esa comida. Si piensas que las comidas del comedor escolar no son las adecuadas, hazlo saber a los responsables.
• Haz que sus desayunos, almuerzos del colegio y sus meriendas, no sean cereales de desayuno, zumos, bollería, o embutidos, ya que todos estos alimentos contienen una gran cantidad de azúcares añadidos o edulcorantes, grasas que no son de calidad como la grasa de palma, harinas refinadas y sal. En otro post, propondremos alternativas saludables para evitar todos estos productos, ¡estad atentos!.
• Lleva al niñx a la compra y deja que nos ayude en la cocina en la preparación de los platos. Implicarles en estas tareas hace que los niñxs se interesen más por la alimentación y adquieran mejores hábitos dietéticos.
• Disminuir el consumo de sal evitando tener el salero en la mesa y añadiendo menos a los platos, además de evitar alimentos que lo contienen en dosis altas.
• No haga comentarios relacionados con el peso o aspecto, ni del niñx, ni suyo, ni de otra persona. Para evitar trastornos del comportamiento alimentario, como pueden ser la anorexia y/o bulimia.
• Mantener un estilo de vida activo, y fomentar la práctica de ejercicio físico fuera de la escuela para evitar el sedentarismo y como consecuencia el exceso de peso.
• Si existe un exceso de peso, ponerse en manos de un Dietista-Nutricionista, ya que es el profesional sanitario capacitado para estos casos.